Disminución del interés por el riesgo en el mercado.
Los rendimientos de los bonos del gobierno estadounidense siguen aumentando, respaldando así a la moneda estadounidense. El bono a 10 años cotiza con un rendimiento justo por encima del 4,6%, mientras que el rendimiento del Tesoro estadounidense a 6 meses está por encima del 5,6%.
Es importante recordar que el presidente de la Reserva Federal anunció la posibilidad de nuevos aumentos del tipo de interés clave este año. Este es claramente un factor fundamental alcista para el dólar estadounidense, que continúa ejerciendo presión sobre este par de divisas.
También llamamos su atención, sobre la próxima publicación del informe sobre la inflación en Alemania. Su caída podría ejercer presión adicional sobre el par, aumentando así la probabilidad de una flexibilización más rápida de la política monetaria del BCE. Pero los comerciantes también deberían prestar atención a la publicación de datos sobre los cambios en las tasas de crecimiento del PIB en los Estados Unidos. Incluso un ligero aumento de este indicador, podría proporcionar un apoyo adicional a la moneda estadounidense. De hecho, en este caso, la Reserva Federal tendrá más posibilidades y argumentos para subir las tasas de interés.
Análisis técnico
El objetivo de 1,0500 ya se ha alcanzado, pero a pesar de la clara ventaja de los vendedores, las ventas activas por encima de este nivel de soporte siguen en riesgo. El escenario bajista sigue siendo prioritario, aunque es muy difícil excluir el riesgo de un crecimiento correctivo. Le recordamos que la zona de soporte técnica entre los límites de 1,0500 y 1,0530 cumplió bien su función durante mucho tiempo. Por lo tanto, la probabilidad de un crecimiento correctivo sigue siendo elevada.
El estrecho rango de precios entre 1,0630 y 1,0675 actúa como zona de resistencia.
El escenario bajista tiene en cuenta una nueva caída hasta el nivel de 1,0400. Aunque una ruptura del soporte 1,0500 abre el camino hacia la siguiente zona de soporte 1,0275-1,0300.