La inflación en los Estados Unidos.
Mañana miércoles, 12 de julio, se publicará el informe de la inflación de los Estados Unidos. El pronóstico apunta a un descenso hasta el 3,1% en términos anuales. La confirmación de este pronóstico, puede reducir significativamente la probabilidad de un nuevo aumento en la tasa de interés clave de la Reserva Federal. Recordemos que, en el mes de mayo, el índice de precios al consumidor (inflación) cayó al 4%, por lo que una caída tan fuerte pronosticada para este índice en el mes de junio, puede limitar el espacio para la Fed.
No estamos hablando de la próxima subida de las tasas de interés de referencia, que está prevista para el 27 de julio. La probabilidad de este aumento supera el 90%. Pero una fuerte caída en la inflación de los EE. UU. reducirá significativamente la probabilidad de nuevos aumentos. Esta es claramente una señal bajista para el dólar estadounidense.
El escenario alternativo, tiene en cuenta la publicación de una reducción de la inflación mucho más modesta que la prevista. Este es un escenario alcista para la moneda estadounidense y bajista para las cotizaciones de este par de divisas.
Escenario alcista
Las cotizaciones del par aún lograron superar el nivel de resistencia en 1.1000 y fijarse por encima de ella. Esta es una buena noticia para los compradores, ya que indica su voluntad de continuar subiendo hacia 1.1090.
Recuerde que el estrecho rango de precios 1.1080-1.1090 es un área de fuerte resistencia técnica, ya que estos son los máximos del año en curso. En consecuencia, para romper esta área y seguir creciendo, los compradores necesitan un factor fundamental alcista realmente fuerte. La publicación de los datos de la inflación en los EE.UU. puede actuar como motor de crecimiento. Por lo tanto, la actividad comercial de hoy, puede permanecer moderada, lo que indica las expectativas de los inversores sobre la próxima publicación de los datos de la inflación.