La semana ha comenzado en zona roja para el Bitcoin, con objetivo en los 56.500 dólares.

El inicio de la semana no ha sido favorable para las criptomonedas, con el bitcoin luchando por recuperarse, tras una caída del 3% el domingo y un descenso acumulado del 6% en la última semana, amenazando al soporte de los 61.000 dólares, mientras el Ethereum también experimenta una tendencia a la baja, cotizando por debajo de los 3.400 dólares.

Las 'altcoins' reflejan un panorama similar, con intentos de recuperación que no logran revertir las pérdidas significativas de las últimas 24 horas. Las criptomonedas como Solana y Toncoin han sufrido caídas superiores al 5%, mientras que otras como XRP, Cardano y Tron muestran descensos más moderados. Las criptomonedas meme Dogecoin y Shiba Inu registran pérdidas del 4,5% y 6%, respectivamente.

El mercado enfrenta turbulencias, evidenciadas por liquidaciones que superan los 150 millones de dólares, en su mayoría de posiciones largas. El sentimiento inversor hacia el bitcoin es extremadamente negativo, manteniéndose así durante las últimas cuatro semanas.

Los ETF de bitcoin al contado también están en declive, sin lograr atraer capital neto desde el 12 de junio, con pérdidas cercanas a los 1.000 millones de dólares. Estrategas de QCP Capital señalan la presión de venta de las compañías de minería de bitcoin y las ventas de BTC por parte del gobierno alemán como factores adicionales que afectan negativamente al mercado.

La ausencia de catalizadores positivos y la cautela de la Reserva Federal sobre su política monetaria para el resto del año, también contribuyen a la incertidumbre del mercado de las cripto monedas. Los inversores, en respuesta, se inclinan por activos más seguros y rentables, de refugio.

Análisis técnico. BTC.

Desde una perspectiva técnica, el bitcoin se encuentra en un canal entre los 60.000 y los 72.000 dólares, a largo plazo. La pérdida del nivel de los 64.000 dólares podría llevar a una caída hacia los 60.000 dólares, un punto crítico que, de ser perforado, podría desencadenar una ola de cierres de posiciones largas y posibles caídas hasta los mínimos anuales de los 57.000 dólares (más exacto a los 56.500). Por el contrario, superar resistencias en los 68.000 dólares podría abrir camino hacia los 72.000 dólares.

Más exactamente, los indicadores y el oscilador estocástico nos presentan un escenario bajista, de ventas, con soportes para los vendedores en 60.560, 60.100, 59.000, 57.700 y por último, en el soporte técnico de los 56.500. Este es el escenario principal.

Un escenario alternativo, sería un regreso sobre los 62.000 dólares, que en caso de fijarse sobre este fuerte nivel de resistencia, los compradores pudiesen regresar sus pérdidas hasta la zona de 64.400 – 64.570, con barreras en su camino en los 62.750, 63.440 y los 64.000.